10 mil campesinos afectadosEcuador: fumigación afectó 34.000 hectáreas
El Nuevo Siglo
Unas 34.000 hectáreas han sido afectadas por las fumigaciones antidrogas de Colombia, denunciaron campesinos ecuatorianos, que además se quejaron de que el Gobierno de sus país aún no haya desarrollado el Plan Ecuador para revertir los efectos de la estrategia militar de Bogotá.
“Somos 10.000 campesinos afectados. Necesitamos plata para rehabilitar las 34.000 hectáreas afectadas por las fumigaciones colombianas”, dijo Daniel Alarcón, dirigente de una organización que reúne a los pobladores de la frontera norte.
Según su testimonio, en 345 kilómetros de territorio común existen más de 96 comunidades perjudicadas por las aspersiones aéreas con herbicida que realiza Colombia con apoyo de Estados Unidos.
Alarcón aseguró que esas personas aún no han recibido asistencia oficial, pese a que el presidente Rafael Correa lanzó, el 24 de abril, el llamado Plan Ecuador para revertir los efectos de la estrategia colombiana contra las drogas y la insurgencia. “Ese plan no superó las declaraciones y buenas intenciones”, sostuvo el dirigente en una declaración difundida por el diario El Comercio.
El Gobierno, por su parte, admitió que el programa “no arranca plenamente” debido a la falta de coordinación entre ministerios y de financiamiento externo.
“Se han realizado varias conversaciones con organismos de ayuda internacional. Está prevista la convocatoria a una mesa de trabajo para exponer los temas en los que nos movemos y los mecanismos”, declaró el viceministro de Defensa, Miguel Carvajal.
El gobierno de Correa prepara una demanda contra Colombia ante la Corte Internacional de La Haya apoyado en evidencia internacional que la señala como la “única nación en el mundo que realiza fumigaciones aéreas con el herbicida glifosato para acabar con cultivos ilegales”, según la Cancillería.
Ecuador asegura que las aspersiones son cancerígenas y dañan el medio ambiente, aunque Bogotá rehúsa esos argumentos y reivindica su derecho a efectuar fumigaciones dentro de su territorio.
Colombia sostiene que tiene argumentos científicos suficientes para demostrar que las fumigaciones de narcocultivos con glifosato, Cosmo Flux y Cos Inn, son inofensivas a la salud humana y el medio ambiente.
Distracción
De otra parte, una ONG aseguró ayer en Quito que Colombia quiere forzar a Ecuador a declarar a las Farc como grupo terrorista y deslegitimar su demanda ante La Haya por las fumigaciones antidrogas.
Colombia “quiere presionar para que las Farc sean declaradas terroristas y al mismo tiempo tratar de desnaturalizar la demanda que está presentando el Gobierno contra Bogotá por las fumigaciones en la frontera”, dijo Ciro Guzmán, director del MPD (Movimiento Popular Democrático, maoísta).
El dirigente rechazó en estos términos los reclamos del vicepresidente de Colombia, Francisco Santos, a organizaciones sindicales de su país por el “respaldo a la lucha armada insurgente”, que expresaron durante un seminario de grupos de izquierda realizado en Quito la semana pasada.
Asimismo, negó que hayan asistido miembros de la guerrilla colombiana y aclaró que su participación se limitó a “enviar unas ponencias que fueron leídas por ecuatorianos”.
El director del MPD desestimó igualmente que la declaración pueda interpretarse como un respaldo explícito a la causa rebelde.
“Este es un documento que recoge la realidad de América Latina, donde existen diversas formas de lucha de los pueblos, incluida la armada. Eso lo respetamos sin que esto suponga un expreso respaldo”, comentó.
Desde Bogotá, Santos señaló que en la declaración estaban las firmas de los frentes internacionales de las Farc y del Eln.
El presidente Rafael Correa rehúsa declarar terroristas a las Farc (como hacen Estados Unidos y Europa), aduciendo que no intervendrá en conflictos de terceros.
